La reversión de ostomía es una cirugía que consiste en cerrar la abertura creada para la ostomía (colostomía, ileostomía, etc.) y restablecer la continuidad del tracto intestinal.
Esta cirugía se realiza entre 6 y 8 semanas. Pero en algunos casos puede llevar hasta 12 meses después de la cirugía de desconexión, sobre todo cuando los músculos del intestino y del ano estén funcionamiento adecuadamente para que la reversión funcione bien.
Es importante destacar que la reversión no siempre es posible o recomendable para todos los pacientes, ya que depende de varios factores, como el estado general de salud, la causa original de la ostomía y la condición del tracto intestinal tras la cirugía.
¿Cómo se realiza el procedimiento de Reversión de Ostomía?
Durante la operación el cirujano realiza los siguientes pasos:
- Eliminación del estoma: Se retira la abertura creada en la pared abdominal, que estaba conectada al intestino.
- Reconexión del intestino: El cirujano conecta nuevamente las partes del intestino que se habían seccionado para crear la ostomía. Dependiendo del tipo de ostomía (Colostomía, Ileostomía, etc), se pueden unir el colon y el recto o se reconecta el intestino delgado.
- Cierre de la incisión abdominal: Después de que se ha realizado la reconexión intestinal, el cirujano cierra la incisión en la pared abdominal. Este paso puede implicar suturas o grapas, dependiendo de las técnicas quirúrgicas utilizadas.
¿Qué se puede esperar después de una Reversión de Ostomía
Tras la cirugía de reconexión, la mayoría de los pacientes permanecerá en el hospital hasta 7 días, dependiendo de la recuperación. Durante este tiempo, se monitorean posibles infecciones, se verifica la función del tracto intestinal y se realizan pruebas para asegurarse de que no haya fugas en la reconexión.
Los primeros días después de la reconexión, es probable que el paciente inicié su alimentación con líquidos y una dieta blanda antes de volver a la alimentación sólida.